Alteridad de superhéroes
Cuando se habla de ciencia ficción y comunidad LGBTI podemos vincular recuerdos a mangas, novelas gráficas, cómics y series televisivas que sin pronunciarse como pertenecientes a personajes de la diversidad sexual, han trazado el camino para que cada vez la visibilidad de estos grupos sin prejuicio y estigma sea una realidad. Las plataformas en streaming han facilitado también el alcance de estos contenidos y su representatividad a un mayor número de población. Tal es el caso de la nueva entrega de Netflix Q-Force (2021), que apuesta a construir una narrativa diferente de lo que se supone que es ser un superhéroe en tiempos donde la disidencia sexual es una realidad que está tomando mayor importancia.
Steve Maryweather y su equipo identificado como queer mezclan sus habilidades espías en la Agencia de Inteligencia Estadounidense para romper una red internacional de tráfico de uranio que pone en peligro al país. Sin embargo, la constante crítica sobre la identidad y orientación sexual de los personajes resulta ser una contraposición de ideas hacia el desarrollo de un trabajo impecable que el equipo queer desempeña para manifestarse en externos la homo, lesbo, bi y transfobia, por lo que el grupo precisa dejar en claro que la heteronorma ya pasó de moda y la diversidad sexual puede enfrentar amenazas que van desde el prejuicio hasta el terrorismo.
En principio podemos encontrarnos con algunos clichés sobre los comportamientos e ideologías de la diversidad sexual, no obstante, cada capítulo rompe estos imaginarios para ofrecer una realidad más certera de aquello que los grupos diversos posicionan como relevante en su caminar por la visibilidad LGBTI.
Q-Force
Director: Michael Schur
Netflix, 2021