La historia gay de la isla
Para nadie es ya un secreto que los regímenes comunistas rechazaron y persiguieron a las personas de la diversidad sexual tanto como lo hicieron los gobiernos de derecha. La homosexualidad, la transexualidad o cualquier otra expresión que se saliera de la norma binaria heterosexual era vista como una amenaza ideológica que había que eliminar.
El gobierno de Fidel Castro en Cuba no fue la excepción. La persecución desplegada en los años sesenta y setenta fue negada por mucho tiempo, pero demostrada por quienes lograron escapar de las condenas a las que se les sometía.
Pero las cosas fueron cambiando en la isla, aunque por muchas décadas parecía que eso jamás iba a suceder. Y así, un buen día de diciembre de 2014, el bloqueo que separaba a Cuba y Estados Unidos llegó a su fin.
Ese día, los gobiernos de ambos países anunciaron que habían decidido iniciar un proceso para restablecer las relaciones diplomáticas. Rubén, un académico gay que estaba de visita en la isla desde Nueva York, pudo palpar el estallido de esperanza y alivio que eso implicaba para el pueblo entero.
En Teoría y práctica de La Habana, el mexicano Rubén Gallo mezcla elementos autobiográficos con novela y crónica para contar la historia de quienes, mucho antes de ese momento de ruptura, tuvieron que vivir sus noches en la clandestinidad. El libro lo protagoniza no sólo él (el cronista, el narrador o el alter ego), sino también los personajes tan conocidos en la sociedad cubana: los trabajadores sexuales o “pingueros”, los hombres gay, las travestis o las mujeres trans, todos hacen gala de su erotismo y de su ingenio para llevarse a la mejor “presa”, una que le dará no solo el placer y la intimidad que está buscando, sino también los recursos económicos para mejorar un poco su situación, al menos por unos días.
Teoría y práctica de La Habana
Rubén Gallo
Editorial Jus, 2018