La historia de la cama
Desde sus comienzos, la humanidad tuvo que resolver múltiples necesidades para su subsistencia, desde el qué comer y cómo preparar los alimentos recolectados o cazados hasta dónde pasar la noche para darle descanso al cuerpo sin el riesgo de ser devorados o o sufrir algún percance con la naturaleza.
El mejor lugar para lograr dicha protección fueron las copas de los árboles. Posteriormente, los fondos de las cavernas, a la luz de las brasas, y después, diversos tipos de construcciones, en las que se adecuaron diferentes espacios para dormir, pero no sólo eso, también para tener relaciones sexuales, dar a luz, comer, e incluso, morir.
Al paso del tiempo, todos esos rincones fueron adecuados con una cama, un objeto que cobró diferentes formas, matices y significados en cada cultura. Desde ser un espacio colectivo en el que toda una familia tenía cupo hasta un espacio individualizado e íntimo o un área compartida por desconocidos, a pesar de estar palmo a palmo.
Irremediablemente, la cama ha sido asociada a la sexualidad de las personas, representando un espacio en el que se intercambian pasiones, flujos, sentimientos, caricias, palabras, experiencias de vida.
Basado en la perspectiva del estudio de los restos materiales y de la antropología de las cosas, en la que se analiza el significado, la utilización, el simbolismo, la interacción y la funcionalidad de los objetos en su contexto sociocultural, especialistas en arqueología rastrean los orígenes de este mueble, tan cotidiano en nuestros días, pero que a lo largo de la historia ha tenido múltiples transformaciones. Así surge el libro Lo que hicimos en la cama, de Brian Fagan y Nadia Durrani (FCE, 2023).
También dan un recorrido por la historia global del mundo hasta nuestros días, en los que la cama es una pieza esencial de cada hogar, y ha sido lo mismo, ornamentada barrocamente que llevada a la mínima expresión, con una gran variedad de diseños o de obsesiones como el construir la más grande o la más pequeña del mundo o hacerla única para despertar múltiples sensaciones, placeres y sueños.
Lo que hicimos en la cama
Brian Fagan, Nadia Durrani
2023/Fondo de Cultura Económica