Cuestionar la enfermedad
Los avances científicos y tecnológicos nos hacen pensar que la inevitable asociación entre enfermedad y muerte cada vez debe diluirse más.
El optimismo no debe de cesar ante la vorágine de opciones y de recursos destinados al tratamiento y la cura de ciertas enfermedades, incluso como parte de los lineamientos de las políticas de desarrollo y de crecimiento socioeconómico. Este es el caso del cáncer de mama, una de las enfermedades que mayor número de muertes de mujeres causa en el mundo año tras año.
Ya hace algunas décadas, la filósofa norteamericana Susan Sontag reflexionaba al respecto, después de haber sido diagnosticada con una anomalía en sus mamas, y cuestionaba el discurso surgido alrededor de ese cúmulo de células reproducidas al vapor hasta convertirse en tumores malignos para el cuerpo.
Dicho ejercicio ha sido la fuente de inspiración de otras mujeres en las mismas condiciones como la ensayista estadunidense Anne Boyer, quien después de haber sido diagnosticada con cáncer de mama triple negativo, el más invasivo de todos, comienza a escribir una especie de anecdotario sobre lo que va ocurriendo en su vida, hasta convertirse en un tratado desafiante de muchas de las visiones y actitudes vigentes en nuestras sociedades con respecto a su enfermedad. De ahí surge Desmorir. Una reflexión sobre la enfermedad en un mundo capitalista (Sexto Piso, 2021).
Inspirada en la obra de Sontag, y de muchas otras escritoras que han realizado el mismo ejercicio, como consecuencia de un diagnóstico similar, Boyer ofrece un análisis con varias lecturas, desde la personal, al ir narrando sus cambios en el cuerpo, en sus interrelaciones, en sus maneras de ver al mundo, hasta político, al cuestionar muchas de las medidas vigentes, de las maneras en que se ha construido el imaginario colectivo con respecto a este tipo de neoplasias, su erotización, su ruptura con las nociones de estética, y las diferentes simbolizaciones que ocurren conforme avanzan la enfermedad y su tratamiento.
Sin decirlo de manera explícita, aparecen en este ejercicio reflexivo las nociones foucaltianas de control y de biopolítica, en ese afán de someter a los cuerpos a ciertos parámetros, las delleuzianas de poder, al diseccionar los diferentes mecanismos de control derivados de la intención de tratar a este cáncer, así como ejercicios semióticos sobre el discurso y las imágenes alrededor del mismo. Una condensación de pensamientos alrededor de las maneras en que se vive una enfermedad en nuestra época, en medio de un agresivo sistema económico.