Coronavirus: mitos y certezas — letraese letra ese

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Coronavirus: mitos y certezas


Desde hace 4 años, Gabriel usa a diario un cubrebocas para salir a la calle debido a que fue diagnosticado con enfermedad pulmonar obstructiva crónica y respirar el aire directo de la Ciudad de México resulta dañino para sus pulmones. El pasado viernes, al ir a la farmacia a comprar un paquete, notó que los cubrebocas estaban agotados, al igual que los geles antibacteriales y productos de desinfección. Le resultó preocupante pues algo que necesita no está disponible debido a que la población ha realizado compras de pánico ante la noticia de que el nuevo coronavirus (covid-19) llegó a México.

Los coronavirus son una familia de virus que causan enfermedades respiratorias que van desde un cuadro de resfriado común hasta síndromes más graves. Los virus respiratorios como este pueden transmitirse por el aire envueltos en pequeñas gotas que se producen cuando una persona enferma respira, habla tose o estornuda.

Síntomas, diagnóstico y tratamiento
Las personas que han adquirido el virus no siempre desarrollarán síntomas, sin embargo, quienes los presentan serán similares a resfriados comunes, es decir, hay fiebre, tos, estornudos, fatiga, dolor de cabeza y ahogo o dificultad para respirar.

Una de las complicaciones de la pandemia de covid-19 es que pueden pasar entre 2 y 14 días antes de presentar síntomas, por ello, el periodo de incubación es determinante para que las autoridades de salud prevean los posibles casos de riesgo de contagio.

Hasta el momento no existe un tratamiento específico para este virus, de modo que se indican medicamentos para aliviar los síntomas. Al ser una enfermedad emergente, no existe vacuna.

Recomendaciones
Se desconoce el tiempo en que el covid-19 es capaz de permanecer en superficies inanimadas, por lo que es importante resaltar la higiene constante de manos, sobre todo después de tocarse nariz, ojos y boca (para evitar la auto inoculación), así como la adecuada limpieza y desinfección de superficies.

Es importante también evitar en lo posible el contacto físico, como los saludos de mano o de beso.

Solo las personas que tienen síntomas o tienen contacto con personas con estos signos deben cubrir las vías de entrada del virus (nariz y boca). Para el resto de la población es recomendado el lavado de manos frecuentes con agua y jabón o utilizar soluciones a base de alcohol al 70 %. El toser o estornudar debe hacerse con un pañuelo desechable o con el antebrazo (higiene de etiqueta) para evitar el contagio a quienes están cerca.

Los objetos de uso común deben ser limpiados y desinfectados como es el caso de oficinas, transporte, centros de reunión y sitios cerrados.

Mitos
Es necesario saber que los antibióticos no funcionan contra virus, por tanto, no deben usarse como un medio de prevención o tratamiento, de igual forma ningún alimento (ajo, limón, etc.) previene el contagio; sin embargo, es indispensable tener una adecuada alimentación y beber agua natural para mejorar el sistema inmunológico.

Algunos hábitos como enjuagarse la nariz con solución salina o hacer gárgaras con enjuague bucal no previenen el contagio del coronavirus.

Uno de los miedos más comunes es tener contacto con objetos provenientes de China, pero las personas que reciben paquetes o cartas de esta zona no corren el riesgo de contraer coronavirus ya que estos no sobreviven por mucho tiempo en objetos.

Cifras
A partir del 30 de enero, la Organización Mundial de la Salud declaró Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional por el brote COVID-19. Si bien el virus es una preocupación seria de salud pública, el riesgo para la mayoría de las personas fuera de China es bajo; sobre todo si se tienen hábitos de higiene individuales y sociales.

Las cifras de transmisión de cualquier pandemia no son fijas, sin embargo, pueden reducirse mediante medidas sanitarias públicas eficaces, como aislar y vigilar a las personas que han tenido contacto con el virus, todo ello con apegado a reglamentos internacionales que prioricen respeto de Derechos Humanos y Civiles.

Según estimaciones de la Dirección de Epidemiología de la Secretaría de Salud, solo el 12 por ciento de las personas infectadas desarrollarán síntomas y de este porcentaje solo entre el 2 y 5 por ciento desarrollarán enfermedad grave.

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